Sin duda esto puede causarte preocupación, pero descuida, que es posible tener un mejor control de tu dinero.
Para empezar bien el año, debes conocer cómo y en qué gastas, además debes comparar tus gastos con tus ingresos y de esta manera podrás hacer un presupuesto para manejar y controlar adecuadamente tu dinero.
No es necesario que pases toda tu vida evitando tener una deuda. Pero debes hacerlo con responsabilidad y en relación a tu capacidad financiera, luego de analizar tus posibilidades reales para asumir el compromiso que significa adquirir una deuda.
No le tengas miedo a las deudas, solo debes aprender a ser consciente sobre el uso de tu dinero y a manejarlas de una forma comprometida.
A continuación te presentamos algunos consejos para que tengas tranquilidad económica en este comienzo de año:
- Haz una lista de todas las deudas. Revisa qué valores tienes pendientes de pago para el nuevo año. Para que sea más útil y logres planificar tus gastos, puedes escribir junto a la deuda, la fecha en que terminas de pagarla y cuál es la forma en la que debes hacerlo.
- Revisa tus deudas con tarjeta de crédito. Anota cuál es la fecha en la que debes cancelar el monto total para que no te atrases y no canceles intereses por mora.
- Realiza un presupuesto realista. Haz estas preguntas ¿cuánto gané el mes anterior? ¿Gasté más de lo que gano al mes? Así sabrás con seguridad cuáles son tus ingresos y cuáles son tus gastos, compáralos y contrólalos. Tus gastos nunca deben ser mayores al dinero que recibes y, de preferencia, que tampoco estén muy cercanos, ya que esto no te permitirá ahorrar ni manejar un imprevisto económico.
- Si crees que gastas demasiado, hay una forma sencilla que puedes utilizar para analizar tus deudas. Durante todo un mes, haz una lista a diario de todo lo que gastas. Al final del mes, analiza en qué estás gastando más dinero de lo que deberías y cuáles gastos son innecesarios para ti, así podrás disminuirlos o eliminarlos.
- Destina un porcentaje para el ahorro. Después de hacer tu presupuesto, reserva una parte de tus ingresos mensuales para ahorrar. Ésta es la mejor manera de estar preparado para cuando tengas que asumir una deuda grande, adquirir bienes y servicios o cubrir gastos o imprevistos a futuro.
Recuerda que las deudas son maneras de facilitar tu economía, no de afectarla y mucho menos de causarte estrés y preocupaciones adicionales. Sé consciente y responsable con el uso de tu dinero y descubrirás las verdaderas ventajas de saberlo administrar.
¡Empieza ahora con tu control de gastos!